La tecnología constructiva con tierra, no está anclada en forma inamovible al pasado sino que se nutre de él y se encuentra en desarrollo constante. La apropiación y aplicación de estas cuestiones, debe estar en concordancia tanto con las técnicas vernáculas de cada lugar como con los recursos humanos, materiales y económicos disponibles.
La tierra resurgió en los últimos años como material constructivo y son cada vez más las personas que deciden vivir en este tipo de construcciones en todo el mundo. En nuestra región se encuentran realidades diferentes ante las cuales esta tecnología se ve desafiada.
Históricamente, la construcción que utilizaba tierra y otros materiales naturales para su ejecución se adecuaba a
las condicionantes del lugar. Hoy en día, esta tecnología constructiva es revisitada y se presenta como una respuesta coherente en el nuevo escenario de
la sostenibilidad.